Todos mis hermanos by Manel Estiarte

autor:Manel Estiarte [Estiarte, Manel]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Crónica, Deporte, Biografía
editor: ePubLibre
publicado: 2009-01-01T00:00:00+00:00

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ELLOS Y NOSOTROS

La historia —o la leyenda— del waterpolo español se inició en el puerto de Barcelona a finales del siglo XIX, cuando, a la llegada de las naves irlandesas e inglesas, los estibadores del puerto organizaban en la escollera con los marineros partidos de «fútbol en el mar», en los que los golpes y las perrerías primaban, aparentemente, por encima de los goles que había que marcar encajando la pelota en algún lugar, quizás una balsa en cada extremo del «campo», quizás un par de «porterías» construidas con palos colocados a la buena de Dios. En algún lugar existen todavía fotografías históricas donde se puede apreciar el primitivismo de este juego que constituye el precedente del waterpolo catalán, a su vez precedente del waterpolo español.

A partir de aquí y del conocimiento de que en el extranjero se estaba practicando un deporte llamado Football in the Water o Aquatic Polo —deporte acuático que en realidad se parecía más al rugby que al polo y al fútbol europeo propiamente dicho— se estableció el primer equipo de waterpolo en el seno del Club Natació Barcelona, al que siguieron como pioneros el del Club Natació Athlétic (que después se llamó «Barceloneta») y el del Club Natació Sabadell hasta llegar, en 1920, a la fundación de la Federación Española de Natación Amateur, legalmente necesaria para participar en los Juegos Olímpicos. En los inicios, por ejemplo en la Olimpíada de París de 1924 —y así fue hasta tiempos recientes, salvo excepciones puntuales—, los equipos de waterpolo estuvieron formado exclusivamente por deportistas catalanes o, en un ámbito más reducido todavía, de los clubs Barcelona y Barceloneta.

Siempre se ha dicho que el waterpolo es una familia: es una frase tan sugerente como fiel a la realidad. Real mente, si repasamos la historia de sus orígenes en Barcelona, después en Catalunya y a continuación en España, encontramos siempre a los mismos protagonistas dentro de una misma generación y a los mismos nombres en las sucesivas generaciones: los hijos, los padres, los abuelos y los bisabuelos del waterpolo se repiten en todas partes casi como una herencia testamental. Ahora, afortunadamente, la familia se ha expandido y el waterpolo tiene un papel en prácticamente todos los clubs de natación catalanes, y cada piscina de este país cuenta con un equipo más o menos fuerte de esta disciplina… Todo se debe al empuje inicial de los pioneros y de sus seguidores.

Hasta aquí, lo que me han explicado, lo que he oído y leído de antes de mí.

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